Instalarse en un nuevo lugar lleva tiempo y requiere la inversión de recursos físicos y mentales. Como resultado, la mayoría de personas optan por mudarse solamente una vez, cuando les toca hacer una vida separada de sus padres. También puede darse el hecho de mudarse de oficina, cuando están expandiendo su negocio. De cualquier manera, a continuación te diremos cuál es la mejor forma de mudarte y por qué.
Qué elementos debes tomar en cuenta al mudarte y por qué
Antes de tomar esta decisión trascendental, es importante que consideres los siguientes elementos:
- La distancia con respecto a amigos y familiares. Podría parecer un punto nimio, pero al cabo de unos meses se hará cada vez más importante. Algunos lugares pudiesen tener hogares o locales comerciales amplios, pero quedan demasiado distanciados de nuestras conexiones y afectos. La idea es conseguir el balance adecuado en este aspecto.
- Zonas comerciales cercanas. Piensa, ¿Tu nuevo hogar tendrá un supermercado cerca para adquirir comida? ¿Qué hay de la farmacia? ¿Cuentas con un hospital cerca para ir en caso de una emergencia? La cercanía de las zonas comerciales es uno de los puntos más importantes a la hora de trasladarte para vivir.
- Seguridad en los alrededores. Dependiendo del país y la zona en donde te encuentres, hay algunos lugares que colindan con zonas de poca seguridad. Es importante ver qué tienes a tus alrededores y determinar qué tan seguro es el entorno en función de tus actividades. Por ejemplo, si eres una persona que trabaja de forma remota y no sale casi de su casa, quizás este no sea un factor tan necesario, pero si tienes hijos pequeños que gustan jugar por los alrededores, es importante analizar a fondo este punto.
- Servicios básicos dentro del nuevo hogar. Antes de decidirte por un hogar o por otro es importante que revises más allá del precio. ¿Tu nuevo hogar cuenta con agua, electricidad y gas de forma correcta? ¿Tiene fallas en alguna tubería? ¿Filtraciones? ¿Hay algo que al anterior dueño se le ha “olvidado” decirte? Este punto es de gran importancia para tu calidad de vida.
Es importante considerar la época del año para mudarse
A pesar de que “no hay tiempo en el que no podamos mudarnos”, resulta mucho más cómodo moverse durante el verano que durante el invierno, por obvias razones. Cuando nos mudamos en verano, tenemos a estar de vacaciones, por lo que movilizarse resulta más fácil y tenemos una mayor cantidad de tiempo. De igual forma, el tráfico de la ciudad suele ser menor, ya que la gente va a diferentes destinos para vacacionar.
Otra ventaja de mudarse durante el verano es que puedes dejar todo listo para cuando se reanuden las actividades rutinarias. Hacer esto durante otro momento del año resulta más difícil porque estarás a mitad del año escolar o a mitad de la jornada laboral. Por esta razón, muchas personas deciden movilizarse durante las vacaciones de forma silenciosa, a fin de armar todo con calma para cuando se reanuden las actividades.
Una de las desventajas que existen cuando nos trasladamos durante el verano es que las empresas suelen estar cerradas. Sin embargo, la mayoría de compañías de mudanzas ofrecen planes especiales para esta época del año, puesto que saben que varias personas pueden pensar lo mismo. Por lo tanto, simplemente necesitas encontrar a la empresa que se adapte a tus necesidades.
Mientras que para la mayoría de las personas que se mudan el verano resulta mejor, otros optan hacerlo durante el frío clima. Y es que si bien la naturaleza puede complicar un poco la logística, estadísticamente los procedimientos asociados con el traslado tienden a ser más rápidos durante esta época del año que en verano. Además, el papeleo transcurre con mayor fluidez, debido a que es menor la cantidad de personas moviendo sus enseres.
Pocas personas quieren mover sus pertenencias personales en el frío y en la nieve, debido a la incomodidad que esto representa. Como resultado, pocas personas tienen que ser atendidas en las áreas administrativas y el proceso es mucho más rápido. Además, los servicios de mudanza en las grandes ciudades tienden a tener una menor demanda durante el invierno.
Es importante tener una buena compañía de mudanzas
Sin importar la fecha del año en la que nos decidamos mudar, es importante contar con una buena compañía de mudanzas para este fin. Generalmente, las mejores empresas trabajan durante todo el año, porque saben que hay diferentes tipos de clientes con gustos muy variados cuando se trata de mudarse de casa u oficina en clima frío o caliente.
Por lo tanto, debe buscar una empresa que ofrezca varios planes dependiendo de la época del año, así como la movilización de bienes. Por lo general, las mejores empresas de mudanzas ofrecen servicios de corta distancia, mudanzas largas, servicios de movilización de instrumentos o servicios por hora, que se pueden adaptar a tus necesidades.
Busca a una empresa que cuente con profesionalismo y experiencia, con las credenciales necesarias para manejar sus artículos personales correctamente. También es bueno que tengan el equipo necesario para llevar los objetos frágiles con la seguridad que se merecen. En general, las empresas de mudanzas más confiables tienen protecciones para los objetos, ofrecen servicios de embalaje y desempaquetado, así como la capacidad de amortiguar cada objeto de acuerdo con su material. También cuentan con protecciones especiales para los pisos de madera, paredes y pasamanos.
Moverte por tu cuenta puede transformarse en una mala experiencia, ya que careces de los elementos deseados. Por lo tanto, es importante que tanto en verano como en invierno, elijas una empresa de mudanzas que se responsabilice de tus objetos y pueda llevarlos de forma segura y rápida al destino.
En conclusión, al mudarte es importante analizar todos los elementos de tu nuevo hogar, así como de tus alrededores. De igual forma, contar con una compañía de mudanzas que te ayude a empaquetar todo correctamente es algo que te liberará de estrés y complicaciones a la hora de trasladarte hacia tu nueva vida.