Mudarte es un evento que la mayoría de personas suele hacer pocas veces en la vida. Por lo general, suele ser cuando salen de la casa de sus padres a hacer su propia vida o cuando cambian de una oficina a otra. Si te encuentras en algo similar a alguna de estas situaciones y necesitas hacerlo lo mejor posible, es importante saber cómo sacar provecho de la circunstancia.
Movilizar objetos y ubicarse en un nuevo destino puede ser estresante en muchas ocasiones. Sin embargo, no son necesarias las malas caras ni las experiencias traumáticas. Por el contrario, si buscas mudarte con una buena empresa, recordarás este día como algo agradable e incluso divertido. Todo dependerá de la organización de tus artículos personales y del tipo de compañía en la que confíes.
En primer lugar, ten claro lo que necesitarás para mudarte
Si quieres mudarte con eficacia, primero necesitas saber cuáles son tus necesidades al ir hacia un nuevo lugar. Por ejemplo, es importante saber el embalaje que requieres, cuáles son los objetos frágiles que trasladarás, cuáles elementos podrás transportar solamente con plástico en la parte superior, cuáles requieren más de una persona para moverse, etc. De hecho, se sugiere dividir los elementos a movilizar en tres categorías diferentes:
- Objetos pesados: estos pueden ser muebles, instrumentos musicales, mesas del comedor, sillas, muebles que sostienen televisores, bibliotecas, etc.
- Objetos semi pesados: que pueden ser libros, instrumentos musicales medianos, objetos de cocina, ollas, etc.
Electrodomésticos: que serán los elementos de cocina o algunas de las máquinas dentro de las oficinas. Computadoras, cocinas eléctricas y hornos microondas entran en esta categoría. - Objetos frágiles: que pueden ser adornos dentro del hogar, objetos de vidrio, pinturas y coleccionables.
- Objetos que no necesitan empaquetarse: estos son aquellos que ofrecen gran resistencia y que no necesitan ser empaquetados para trasladarse. Pueden ser objetos grandes de metal o muebles de buen tamaño. En este caso, deberán protegerse las esquinas, a fin de que no dañen el nuevo entorno al llegar.
Una vez que hayas clasificado tus objetos en función de lo que son, puedes comunicarte fácilmente con la compañía de mudanzas. Por lo general, podrás hacerlo a través de un número telefónico, una página web o una aplicación.
Ventajas de contratar una buena compañía de mudanzas
Al encontrar una buena compañía de mudanzas podrás hacer que tu traslado sea lo más rápido posible. Por lo general, puedes llamar sin cargos y obtener una cotización basada en tus necesidades. Por ello es tan importante que tengas claridad sobre lo que vas a mover y qué tipo de movilización requieres. Las empresas de mudanzas generalmente ofrecen varios servicios y también pueden adaptar sus planes especiales en función de lo que solicites. Puedes encontrar:
- Planes de larga distancia. En caso de que quieras moverte de una ciudad a otra o a nivel internacional.
- Planes a corta distancia. Cuando quieres abarcar distancias pequeñas o mudarte dentro del mismo estado.
- Mudanzas por hora. Especialmente diseñadas para la organización de eventos.
- Mudanzas especiales. Diseñadas para movilizar instrumentos musicales, obras de arte u objetos similares.
Cuando llames a la compañía de mudanzas deberás aclarar el tipo de movimiento que deseas llevar a cabo. ¿De qué se trata? ¿Quieres mudarse de una casa a otra? ¿Estás trasladando maquinaria hacia una nueva oficina? ¿Quieres mover unos cuadros para la inauguración de una exposición de arte?
Al tener la información precisa no tendrás que preocuparte por el embalaje. Las empresas de mudanza suelen ofrecer este servicio, a fin de que no tengas que buscar cajas extrañas en la basura o en lugares inauditos. Esto te ahorrará mucho tiempo, permitiendo que te dediques realmente a lo que deseas.
Encuentra el momento del año para mudarte
En realidad, puedes mudarte en cualquier época del año, ya que cada momento ofrece sus ventajas. Por ejemplo, las personas que optan por mudarse en verano, suelen tener mejor tráfico y más tiempo para instalarse. Esto se debe a que las personas suelen estar de vacaciones, tanto en sus trabajos como en sus escuelas. De esta forma, hay mayor tiempo para desempacar, analizar en dónde van los nuevos objetos y configurar el nuevo hogar o la nueva oficina.
Si decides mudarte durante el invierno, puedes tener algunos inconvenientes relacionados con el clima. Sin embargo, el papeleo puede ser mucho más fácil, ya que casi nadie quiere mudarse en esta época debido al frío clima. Queda en ti elegir la época del año que más te convenga.
Lo que sí es cierto es que mudarse es una experiencia que cambia tu rutina y mejorará tu calidad de vida. Está llena de emoción, porque realmente no sabemos lo que nos espera y tenemos muchos nuevos lugares para conocer, vecinos que podrían convertirse en nuevos amigos o áreas en las que podríamos divertirnos o conocer nuevos amores.
Al contratar los servicios de una buena empresa de mudanzas, una experiencia tan grande como esta puede ser aún mejor de lo que imaginas. Podrás:
Ahorrar tiempo al no tener que invertirlo en empaquetar, desempaquetar, pensar en la clase de objetos que estás movilizando, etc.
Continuar tu trabajo mientras los expertos en mudanzas se dedican al suyo.
Evitar problemas de salud asociados al cansancio excesivo o a desviaciones de la columna por cargar pesos excesivos sin técnica.
Mudarte de forma rápida y efectiva, sin pensar en que los objetos podrían salirse de empaques improvisados en el camino, o romperse debido a que no tienen las protecciones adecuadas.
Elegir y asesorarte en función de lo que mejor conviene. (Si debes mandar objetos de un país a otro, lo mejor será hacerlo por aire o mar, por ejemplo).
En conclusión, mudarte puede cambiar tu vida radicalmente, pero lo mejor será contar con una buena empresa de traslados que te permita evitar el estrés. De lo contrario, podrías recordar este momento con una gran carga de emociones negativas, problemas asociados a la integridad de los objetos que estás trasladando, así como pérdidas de tiempo en general.